martes, 22 de julio de 2008

Escribe, borra, modifica


Imagina por un momento un mundo en el que nada importe, en el que todos tengamos el mismo poder, en el que nadie sea más que nadie.

Genial, ¿no crees? Igualdad de poder, algo deseado durante mucho tiempo, pero una gran Utopía... que lástima, pero en la imaginación no existen las cosas imposibles.


Imagina por un segundo que el mundo es moldeable por tus manos, que puedes simplemente hacerlo del tamaño que quieras, que tú decides quiénes pueden vivir en él y quiénes no.

Llamativo, ¿Cierto? Poder decidir cobrar tu venganza prohibiendo vivir en la Tierra a las personas que en algún momento te han molestado o jodido literalmente.


Imagina por un instante que tú decides la importancia de las cosas, que sólo con chasquear los dedos puedes obtener lo que quieras, que tienes el mundo a tus pies.

Increíble, ¿Verdad? La imaginación humana da para ésto y más, todo es cuestión de planteárselo, todo es posible en tu mente, si así lo deseas.


Imagina por un periodo que puedes hacer lo que quieras, tener a quien quieras y vivir el tiempo que quieras; que sólo tú puedes acabar con la mala racha de las personas y ponérsela a quien quieras.

Sería lo más, ¿eh que sí? Decidir tú lo que está prohibido y lo que no, los sentimientos y la suerte de las personas. Parece tentador...


Ahora olvídalo. Ser como Dios es odioso, la gente no cree en ti, te odia e incluso maldice tu nombre. Abre los ojos y olvida tu mundo, intenta ver la realidad tal como es, acéptala y mira el lado bueno de las cosas. Siempre he oído que todas las cosas tienen un lado bueno, que todo depende de como lo mires... haz el pino, ponte de lado, míralo de perfil... ¿le encuentras el lado bueno? Yo tampoco. Quizás sea verdad que el mundo cada vez está peor. Probemos con algo más pequeño, como por ejemplo el hambre en el mundo. ¿Tampoco le ves el lado bueno? Ya somos dos.

Nuestro Padre y Señor nos salvará, nos lo dijo con sus bienaventuranzas, y nos llevará al reino del Cielo. Siento decíroslo, el reino del Cielo se ha quedado sin plazas, las bienaventuranzas se han olvidado y Vuestro Padre y Señor sufre de apatía. En conclusión, el mundo se va a la mierda porque está gobernado por seres humanos, que sólo buscan el propio bienestar.

¿Cuántas razas de animales más hay que extinguir para que se prohiba la caza para obtener pieles? ¿Cuántos bosques hay que deforestar para empezar a reciclar? ¿Cuántos ríos de agua potable han de quedar para que la contaminación baje en picado? Y por último, ¿cuánta gente más debe morir para que las armas desaparezcan?Si el mundo fuera como un texto ya se habría borrado a si mismo muchas veces, habría modificado la evolución y habría escrito una bonita fabula llena de animales pacíficos que sólo siguen la red alimenticia.

Muchas gracias por su atención.

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